En estos cortos e intensos últimos cinco meses en los que he tenido la gran suerte de poder volver a formar parte del sistema educativo, pero esta vez desde la perspectiva del docente y dejando atrás la visión del alumno, he podido experimentar un cambio de visión con respecto a la Educación.
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| Fuente: Blog de Gesvin |
Este cambio de visión ha sido gracias al periodo de prácticum, que he realizado hace apenas unas semanas y ha sido en esta etapa evolutiva de mi formación en la que mi visión del ámbito educativo ha dado un giro de 180º, dado que desconocía todos los aspectos que engloba el mundo de la educación, ya que no solo abarca el centro y sus docentes, sino que va más allá; abarcando la familia y la red social del alumno.
A través del periodo de prácticas, y complementado con la teoría del máster, he podido descubrir desde la evolución de la metodología que hoy en día empieza a estar presenta en las aulas, la importancia del trabajo conjunto familia- sociedad-escuela, hasta el fomento de las herramientas TIC que han aflorado en la educación y que gracias a la ubicuidad y desarrollo de las mismas, se puede llegar al punto de establecer un proceso educativo y pedagógico motivador, y con ello llegar al éxito en lo referente a la enseñanza-aprendizaje, que tanto anhelamos para nuestros estudiantes.
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| Fuente: Sandra Villapalos |
Ser docente, no es sinónimo de trabajar cinco horas, desarrollando un tema que está ya descrito en un libro de texto y disponer de dos meses de vacaciones, sino que ser docente es ser un profesional en constante formación, ya que la evolución del mundo no se para y por consiguiente la educación no es una enseñanza muerta, sino que está en constante evolución. Tal y como nos indicaba recientemente Eduard Vallory en su charla, si queremos educar a los ciudadanos del futuro, debemos formar parte del mismo evolucionando día a día, y manteniendo un enfoque optimista por lo que respecta a la evolución metodológica.
Personalmente, entiendo que un docente es aquel profesional que formará las bases educativas del futuro, y no hay mayor gratitud o herencia educativa que la que se pueda observar en años venideros cuando el trabajo bien hecho tiene sus frutos en la sociedad. Una sociedad que en un tiempo próximo será quien nos guíe y tome las riendas del desarrollo humano.
Finalmente, no podemos olvidar que con unas buenas y sólidas bases, fácilmente llegaremos a alcanzar un éxito evolutivo. Por lo tanto, pararse un instante y auto-reflexionar de hacía donde queremos encaminar nuestra profesión y por tanto el futuro, es un trabajo necesario y constante.
A continuación comparto con todos vosotros los aspectos comunes de nuestras trayectorias en este máster.
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